Deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte
Por Javier Caso Iglesias. Empleado público y analista político
En mi anterior artículo de opinión indicaba, en cuanto a qué entendemos por armar un espacio constitucionalista amplio en España, que la propuesta consta de dos partes (https://tinyurl.com/22dkb8aq). En el citado artículo, como en el anterior al mismo en el que abordaba el nuevo eje conceptual constitucionalismo vs. populismo (https://tinyurl.com/248wq5xf) sólo desarrollé una parte de la propuesta, la otra parte la abordo en el presente texto que titulo: Deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte.
Se nos ilustra en la website "definición.de" que el concepto o idea de deconstrucción se emplea en el terreno de la filosofía y de la teoría literaria con referencia al acto y el resultado de deconstruir. Este verbo, que procede del vocablo francés déconstruire, alude a desmontar una estructura desde el plano conceptual/ideal hasta el práctico. El prefijo "de-", que puede traducirse como "de arriba hacia abajo" y la partícula "con-", que significa "globalmente".
O sea, que para armar un espacio constitucionalista fuerte en España, con sentido de Estado, se hace necesario deconstruir el PSOE, esto es, desmontarlo globalmente, de arriba a abajo. En resumen, desechar el actual PSOE en su totalidad pues es una opción política entregada en cuerpo y alma al populismo chavista y cuyo actual secretario general, Pedro Sánchez, cuenta, como nos dice el histórico político socialista Nicolás Redondo, con "el acuerdo de todos los partidos anticonstitucionales" (https://tinyurl.com/2d59zxnm). Acuerdo del PSOE con "todos los partidos anticonstitucionales" para que "La igualdad, la libertad de parte de los ciudadanos españoles, el respeto a la ley y a los usos democráticos, quedan suspendidos en España. La concordia mínima para que una democracia funcione, disuelta. La posibilidad de una política reformista, que haga de España un país capaz de enfrentarse al futuro, abolida".
Y es que el momento es ahora, toca abandonar el Titanic en el que se ha convertido el actual PSOE que se hunde por seguir las normas que imponen los prófugos de la justicia. Los socialistas liberales y socialdemócratas no pueden seguir alienados por esta fantasmagoría en la que se ha convertido el PSOE de Pedro Sánchez. Como afirma alto y claro Nicolás Redondo, "el PSOE no representa la izquierda que necesita España" puesto que se han situado "con quiénes frecuentemente en nuestra historia frustraron las ilusiones de progreso de los españoles, porque en el siglo XIX fue el carlismo y hoy es un integrismo nacionalista egoísta, xenófobo y antieuropeo".
Como muy certeramente afirma Joaquín Leguina sobre el pacto del PSOE con el partido del expresidente catalán huido de la Justicia, Carles Puigdemont, así como los de los pactos del PSOE con EH Bildu, el PNV o Esquerra Republicana (ERC) son "una pandilla de sectarios que se han unido con el señor Pedro Sánchez" y "con los sectarios vamos de secta en secta, es decir, de mentira en mentira".
Esperamos que en esta tarea de deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte ayude el Partido Popular constituyéndose en esa alternativa que España necesita, para ello tiene que tener en cuenta que los votos son prestados y que debe de hacer una coherente gestión de ellos; evitando las confrontaciones estériles con Vox, cuyo electorado es otro. Como ya hemos dicho en otras ocasiones, existen tres millones de votos en el centro-izquierda huérfanos de referente político que el 23J se abstuvieron (o votaron en blanco o hicieron un nulo) por esa estrategia errática del Partido Popular que se inició tras el 28M. El objetivo del PP no debe ser lograr votos a su "right" a través de una "OPA Hostil" a Vox, pues ello puede hacer perder otros tantos millones de votantes a su "left".
La finalidad del Partido Popular ha de ser "agrupar al electorado de centro izquierda moderado (constitucionalista liberal progresista y socialdemócrata) al que no le gustan las excentricidades. Es pragmático por naturaleza y valora la consecución de resultados prácticos. De ahí que su referente, por ejemplo de los leguinistas (Joaquín Leguina), sea Isabel Díaz Ayuso. Una trabajadora infatigable, gran conseguidora de resultados en la Comunidad de Madrid y que sólo arremete contra el sanchismo y su panda. Respetando escrupulosamente a sus aliados o socios preferenciales (Vox), tanto que los hace pasar desapercibidos en su estrategia. Esto es el "crecer por el centro sin mirar a Vox" del que habla Juanma Moreno" (https://tinyurl.com/22dkb8aq).
A partir de ahora cada convocatoria electoral será un plebiscito (Murcia si se repiten las elecciones autonómicas este año 2023 y las elecciones Gallegas, Vascas y al Parlamento Europeo en 2024), el Partido Popular y Alberto Núñez Feijóo se juegan mucho. O saben activar y movilizar al electorado de "voto líquido o prestado" (https://tinyurl.com/26lcrop7) o tendrán que buscar un nuevo liderazgo. El año 2024 será clave para saber si será Alberto Núñez Feijóo quién, desde el Partido Popular, ayudará en la tarea de deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte en España; pues los votos son prestados y hay que trabajar coherentemente y con certero esfuerzo para conseguirlos. Dado que se trata de "un espacio electoral transversal, que no practica el voto identitario ideológico; pues conocido es que el voto identitario ideológico es el que lleva a ese comportamiento que describe la frase «tápate la nariz y vótanos como lo haces siempre». Este voto transversal, además, trasciende bloques ideológicos; no está constreñido por ellos. El ejemplo actual más claro es el de los leguinistas (seguidores de Joaquín Leguina) que en Madrid votan en su totalidad a Isabel Díaz Ayuso" (https://tinyurl.com/2dkkz4no).
En mi anterior artículo de opinión indicaba, en cuanto a qué entendemos por armar un espacio constitucionalista amplio en España, que la propuesta consta de dos partes (https://tinyurl.com/22dkb8aq). En el citado artículo, como en el anterior al mismo en el que abordaba el nuevo eje conceptual constitucionalismo vs. populismo (https://tinyurl.com/248wq5xf) sólo desarrollé una parte de la propuesta, la otra parte la abordo en el presente texto que titulo: Deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte.
Se nos ilustra en la website "definición.de" que el concepto o idea de deconstrucción se emplea en el terreno de la filosofía y de la teoría literaria con referencia al acto y el resultado de deconstruir. Este verbo, que procede del vocablo francés déconstruire, alude a desmontar una estructura desde el plano conceptual/ideal hasta el práctico. El prefijo "de-", que puede traducirse como "de arriba hacia abajo" y la partícula "con-", que significa "globalmente".
O sea, que para armar un espacio constitucionalista fuerte en España, con sentido de Estado, se hace necesario deconstruir el PSOE, esto es, desmontarlo globalmente, de arriba a abajo. En resumen, desechar el actual PSOE en su totalidad pues es una opción política entregada en cuerpo y alma al populismo chavista y cuyo actual secretario general, Pedro Sánchez, cuenta, como nos dice el histórico político socialista Nicolás Redondo, con "el acuerdo de todos los partidos anticonstitucionales" (https://tinyurl.com/2d59zxnm). Acuerdo del PSOE con "todos los partidos anticonstitucionales" para que "La igualdad, la libertad de parte de los ciudadanos españoles, el respeto a la ley y a los usos democráticos, quedan suspendidos en España. La concordia mínima para que una democracia funcione, disuelta. La posibilidad de una política reformista, que haga de España un país capaz de enfrentarse al futuro, abolida".
Y es que el momento es ahora, toca abandonar el Titanic en el que se ha convertido el actual PSOE que se hunde por seguir las normas que imponen los prófugos de la justicia. Los socialistas liberales y socialdemócratas no pueden seguir alienados por esta fantasmagoría en la que se ha convertido el PSOE de Pedro Sánchez. Como afirma alto y claro Nicolás Redondo, "el PSOE no representa la izquierda que necesita España" puesto que se han situado "con quiénes frecuentemente en nuestra historia frustraron las ilusiones de progreso de los españoles, porque en el siglo XIX fue el carlismo y hoy es un integrismo nacionalista egoísta, xenófobo y antieuropeo".
Como muy certeramente afirma Joaquín Leguina sobre el pacto del PSOE con el partido del expresidente catalán huido de la Justicia, Carles Puigdemont, así como los de los pactos del PSOE con EH Bildu, el PNV o Esquerra Republicana (ERC) son "una pandilla de sectarios que se han unido con el señor Pedro Sánchez" y "con los sectarios vamos de secta en secta, es decir, de mentira en mentira".
Esperamos que en esta tarea de deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte ayude el Partido Popular constituyéndose en esa alternativa que España necesita, para ello tiene que tener en cuenta que los votos son prestados y que debe de hacer una coherente gestión de ellos; evitando las confrontaciones estériles con Vox, cuyo electorado es otro. Como ya hemos dicho en otras ocasiones, existen tres millones de votos en el centro-izquierda huérfanos de referente político que el 23J se abstuvieron (o votaron en blanco o hicieron un nulo) por esa estrategia errática del Partido Popular que se inició tras el 28M. El objetivo del PP no debe ser lograr votos a su "right" a través de una "OPA Hostil" a Vox, pues ello puede hacer perder otros tantos millones de votantes a su "left".
La finalidad del Partido Popular ha de ser "agrupar al electorado de centro izquierda moderado (constitucionalista liberal progresista y socialdemócrata) al que no le gustan las excentricidades. Es pragmático por naturaleza y valora la consecución de resultados prácticos. De ahí que su referente, por ejemplo de los leguinistas (Joaquín Leguina), sea Isabel Díaz Ayuso. Una trabajadora infatigable, gran conseguidora de resultados en la Comunidad de Madrid y que sólo arremete contra el sanchismo y su panda. Respetando escrupulosamente a sus aliados o socios preferenciales (Vox), tanto que los hace pasar desapercibidos en su estrategia. Esto es el "crecer por el centro sin mirar a Vox" del que habla Juanma Moreno" (https://tinyurl.com/22dkb8aq).
A partir de ahora cada convocatoria electoral será un plebiscito (Murcia si se repiten las elecciones autonómicas este año 2023 y las elecciones Gallegas, Vascas y al Parlamento Europeo en 2024), el Partido Popular y Alberto Núñez Feijóo se juegan mucho. O saben activar y movilizar al electorado de "voto líquido o prestado" (https://tinyurl.com/26lcrop7) o tendrán que buscar un nuevo liderazgo. El año 2024 será clave para saber si será Alberto Núñez Feijóo quién, desde el Partido Popular, ayudará en la tarea de deconstruir el PSOE para armar un espacio constitucionalista fuerte en España; pues los votos son prestados y hay que trabajar coherentemente y con certero esfuerzo para conseguirlos. Dado que se trata de "un espacio electoral transversal, que no practica el voto identitario ideológico; pues conocido es que el voto identitario ideológico es el que lleva a ese comportamiento que describe la frase «tápate la nariz y vótanos como lo haces siempre». Este voto transversal, además, trasciende bloques ideológicos; no está constreñido por ellos. El ejemplo actual más claro es el de los leguinistas (seguidores de Joaquín Leguina) que en Madrid votan en su totalidad a Isabel Díaz Ayuso" (https://tinyurl.com/2dkkz4no).